China ha exigido al gobierno argentino que el economista Javier Milei pague el swap y ha amenazado con dejar de comprar soja y carne del país. Esta reacción se debe a un incidente diplomático causado por una reunión secreta entre la canciller argentina, Diana Mondino, y la representante de Taiwán en Argentina. China considera esta reunión como una violación de su soberanía y ha tomado represalias, activando el proceso de cobro del swap y aumentando las importaciones de soja y maíz de Brasil. Además, China ha decidido priorizar a Brasil en sus compras de estos productos agrícolas y está considerando reemplazar las importaciones de carne de Argentina por carne australiana y ganado en pie de Uruguay.

La tensión entre China y Argentina se ha intensificado debido a este incidente diplomático. China ha tomado medidas para exigir el pago del swap que el gobierno argentino utilizó, por valor de unos 5000 millones de dólares más intereses. También ha aumentado las importaciones de soja y maíz de Brasil, en lugar de Argentina. Además, China está considerando dejar de comprar carne argentina y reemplazarla por carne australiana y ganado en pie de Uruguay. Estas acciones podrían tener un impacto significativo en la economía argentina, ya que China es su principal socio comercial y representa una gran parte de las exportaciones de soja y carne del país.

Este incidente diplomático ha puesto de manifiesto la importancia de mantener buenas relaciones con China para Argentina. China ha sido un socio comercial crucial para Argentina en los últimos años, y cualquier ruptura en estas relaciones podría tener graves consecuencias económicas para el país. El gobierno argentino ahora se enfrenta al desafío de rectificar su postura anti-China y buscar una solución diplomática para evitar mayores represalias por parte de China.