El gobierno argentino ha intensificado sus esfuerzos para acercarse a las provincias en medio de las negociaciones que se llevan a cabo en el Congreso. Las autoridades nacionales han mantenido reuniones con varios gobernadores, buscando establecer acuerdos sobre inversiones y brindar asistencia ante los incendios que han afectado el sur del país. Esta semana, un mandatario de la Patagonia podría regresar a la Casa Rosada para continuar con las discusiones.

Desde la Casa Rosada, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, junto con el vice del Interior, Lisandro Catalán, y el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, han estado recibiendo a los representantes provinciales en diversas ocasiones. Durante estas reuniones, se han abordado no solo los acuerdos de financiamiento para obras en las provincias, sino también la asistencia necesaria para combatir los incendios que han devastado varias áreas.

A finales de enero, Francos y Catalán se reunieron con el gobernador de Neuquén, Rolando Figueroa, para discutir convenios de consolidación de deuda. En encuentros posteriores, se sumaron otros gobernadores, quienes también plantearon sus necesidades y preocupaciones. Por ejemplo, el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, solicitó ayuda para enfrentar los incendios, y se le ofreció asistencia material y financiera.

El gobierno ha desplegado recursos significativos para combatir los incendios, incluyendo aviones, helicópteros y brigadistas. Además, se han destinado miles de millones de pesos a las provincias afectadas para la reconstrucción de viviendas. Mientras tanto, la situación política en el Congreso es tensa, ya que se espera que los gobernadores jueguen un papel crucial en la negociación de proyectos importantes, como la suspensión de las elecciones primarias.

El gobierno necesita reunir los votos necesarios antes del 20 de febrero para aprobar varias iniciativas, y la influencia de los mandatarios provinciales será clave en este proceso.