El gobernador Axel Kicillof ha decidido suspender un acto programado para este sábado en Mar del Plata, donde iba a presentar su estrategia política junto a aproximadamente 40 intendentes. Esta decisión se produce en medio de un clima de creciente inseguridad, especialmente en el conurbano, y tras el trágico asesinato de Matías Paredes, un joven de 26 años que fue baleado por cinco policías de La Bonaerense durante una confusa persecución en la misma ciudad costera.

Desde la Casa de Gobierno se comunicó que la reprogramación del evento se debe a un «respeto humanitario» hacia la familia de la víctima. «La muerte de Matías a manos de la policía fue una tragedia que no podemos ignorar», afirmaron. En los días previos al asesinato, también se había registrado el homicidio de Cristian Velázquez, un comerciante que fue asesinado por dos delincuentes en un robo.

A pesar de que desde La Plata se minimiza la situación de inseguridad, argumentando que los homicidios en ocasión de robo han disminuido un 55.6% en comparación con el año anterior, la preocupación persiste entre los intendentes peronistas, quienes han solicitado la presencia de gendarmería en el conurbano para hacer frente a la ola de delitos.

La suspensión del acto también se vio influenciada por la posibilidad de protestas organizadas por sectores políticos en desacuerdo con el gobierno. Kicillof había planeado este evento como el inicio de una serie de actividades en toda la provincia para fortalecer su presencia política y apoyar candidaturas locales. Sin embargo, el clima de tensión y la reciente tragedia han llevado a una reevaluación de sus planes.

Este viernes, el gobernador interrumpió su agenda en Bahía Blanca para reunirse con la familia de Matías Paredes, expresando su solidaridad y asegurando que el gobierno actuó rápidamente al apartar a los policías implicados, quienes ya se encuentran detenidos a la espera de juicio.