“El Gobierno anterior les decía a los trabajadores que se hagan emprendedores y que repartieran pizzas”, dijo el Presidente al inaugurar una ampliación del Hospital Rubén Caporaletti, junto al ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, y el intendente local, Mario Ishii.
El Presidente desestima el espíritu emprendedor y vé como trabajo digno la relación de dependencia. Su objetivo parece imposible luego de tres años de gestión y magros resultados debido a la alta carga impositiva que significa contratar a alguien y la baja motivación de contratar que generan las políticas económicas y una inflación anual que roza el 100%.
Fernández aseguró este martes que «solo cumple con la obligación constitucional de mejorar la vida a todos los argentinos desde una perspectiva federal», al inaugurar una ampliación del Hospital Rubén Caporaletti del partido bonaerense de José C. Paz, donde se anunció la finalización de las primeras 2.838 obras públicas realizadas por el Gobierno nacional en todo el país.
“A mi nadie me tiene que agradecer nada, sólo cumplo con mi deber. Tenemos más de 2.800 obras terminadas y eso me da mucho orgullo”, señaló Fernández en un acto al que asistieron el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, y el intendente local, Mario Ishii, según informaron fuentes oficiales.
Fernández aseguró que «la ciencia es soberanía» y recordó que su gobierno «no fue el que endeudó al país». «Con ciencia vamos a producir cosas como vacunas y o se las vamos a tener que pedir a nadie. No fuimos nosotros los que endeudamos al país. Firmamos un acuerdo con el FMI para pagar después de haber crecido», apuntó.
El Presidente afirmó que defenderá las paritarias y que quiere que los argentinos “tengan un trabajo digno”. “El Gobierno anterior les decía a los trabajadores que se hagan emprendedores y que repartieran pizzas. Quiero en cambio que los argentinos tengan trabajo digno”, señaló.