Pulsa «Intro» para saltar al contenido

Greta Thunberg le dijo «pene pequeño» a un provocador y los usuarios festejaron en las redes

Greta Thunberg y Andrew Tate se han convertido en protagonistas de una de las polémicas más recientes en las redes sociales. Andrew Tate, un ex luchador de kickboxing y participante de Gran Hermano, ha intentado promocionar su colección de coches de lujo a costa de la activista ambientalista Greta Thunberg. La respuesta de la joven ha dejado a todos los usuarios de las redes sociales boquiabiertos.

Tate se dirigió de forma específica a Thunberg para decirle: “Hola Greta Thunberg. Tengo 33 coches. Mi Bugatti tiene un turbo 16 8.0L [en referencia al enorme gasto de combustible que genera]. Mis dos Ferrari 812 competizione tienen 6.5L v12s.. Esto es solo el comienzo. Por favor, dame una dirección de email de forma que te pueda mandar una lista completa de mi colección de coches y sus enormes emisiones”.

A lo que ella contestó solo unas horas después: “Sí, por favor, ilumíname. Mándame toda la información a energíadepenepequeño@búscatelavida.com”

La contestación de Greta ha sido una absoluta conmoción en la red social donde ha conseguido 51.000 retuits y 200.000 likes en menos de una hora. El ex luchador de Kickboxing ha logrado la repercusión global que buscaba las marcas de automóviles que promociona pero no en el sentido esperado.

La polémica entre Andrew Tate y Greta Thunberg ha sido un tema de conversación recurrente en las redes sociales, donde se ha puesto de manifiesto la diferencia de pensamiento entre una activista ambientalista y una figura conocida por sus ideas misóginas y conspiranoicas. El intento de promoción de la colección de coches de lujo de Tate ha fracasado estrepitosamente, siendo su respuesta de Thunberg el único ganador de esta polémica. Esta controversia ha puesto de manifiesto la lucha por el medio ambiente y la importancia de la responsabilidad social en un momento en el que el cambio climático se ha convertido en uno de los principales problemas globales.

En un mundo cada vez más consciente de la necesidad de establecer un mejor equilibrio entre el medio ambiente y las necesidades humanas, la polémica entre Andrew Tate y Greta Thunberg ha servido como un recordatorio de la importancia de la responsabilidad social. La joven activista ha demostrado ser una voz firme para la lucha contra el cambio climático, mientras que Tate ha demostrado que sus ideas misóginas y conspiranoicas no tienen cabida en el discurso actual. Esta polémica ha reforzado la necesidad de crear una cultura de cuidado del medio ambiente y de respeto a los derechos de la mujer.