“Que particularidad que Vidal y Macri ‘el gato’, terminen las obras del Arroyo del Gato”, dijo el jefe de Estado, ante la sorpresa de la Gobernadora, que luego festejó el chiste con muchas sonrisas.

Mauricio Macri y la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, supervisaron hoy una serie de obras hidráulicas que se realizan sobre el Río Salado, destinadas a reducir el impacto de las inundaciones y mejorar la calidad de vida de casi 1.5 millones de bonaerenses.

Desde Roque Pérez, Macri destacó que iniciativas como la del Plan Maestro del Río Salado significan generar “trabajo y progreso para muchísimos argentinos” y las bases “para construir ese país que todos queremos”.

Aseguró además que la obra hídrica “reincorporará más de un millón de hectáreas a la producción” y llevará alivio en forma directa a 200 mil vecinos “que no van a volver a sufrir cuando ven que se larga a llover”.

Por su parte, Vidal expresó: «Esta obra es un orgullo, ya no son carteles, ni promesas ni anuncios. Se puede ver, es una realidad. Hay más de 300 obras hidráulicas empezadas y terminadas durante este mandato, y hay otras 150 en ejecución. Son obras que empiezan y se terminan, que son realidades concretas que hacen que la gente deje de inundarse. La gente puede ver que sus impuestos terminan donde deben terminar: en obras como estas que cambian la vida para siempre».

Vidal calificó al emprendimiento como «la obra hidráulica más importante de la provincia de Buenos Aires, porque va a significar un antes y un después: para miles de bonaerenses, va a significar no tener el agua dentro de sus casas inundación tras inundación, como ocurrió en las últimas décadas», y posibilitará además «recuperar más de un millón de hectáreas productivas».

«Esta no es sólo una herramienta para prevenir inundaciones, sino también para trabajar frente a la sequía, como la del año pasado. Debió haber estado terminada en el 2011, y si hubiera estado terminada, la Provincia no habría atravesado tantas inundaciones, no habría perdido todo lo que perdió y habría tenido una herramienta contra la sequía», aseveró.

Dato no menor, en un momento de su discurso, Macri bromeó con el apodo que le puso la gente, en especial los anti-macristas. “Que particularidad que Vidal y Macri el gato, terminen las obras del Arroyo del Gato”, dijo, ante la sorpresa de la gobernadora, quien luego festejó el chiste con sonrisas.

Por otro lado, según informaron, la iniciativa, impulsada de manera conjunto por el gobierno provincial y la Nación, actualmente atraviesa su cuarta etapa, destinada a adecuar, ensanchar y profundizar el cauce del Río Salado para permitir un mejor escurrimiento del agua.

Esta obra constituye el mayor impulso para la prevención de inundaciones que se está realizando actualmente en todo el país, y se extiende a lo largo de 220 kilómetros, desde el partido de General Belgrano al de Bragado.