En un mensaje incendiario, el presidente Javier Milei profundizó los ataques hacia la prensa luego de sus cruces con los reconocidos periodistas Marcelo Longobardi y Eduardo Feinmann. A través de un extenso tuit, el mandatario acusó al periodismo de gustar del «boxeo duro» donde su «rival tiene que estar atado de pies y manos».

«Gracias a la tecnología y las redes sociales, los delincuentes del micrófono hoy ven que sus víctimas no sólo han logrado desatarse sino que además tienen gran capacidad de respuesta«, advirtió Milei, calificando a sus seguidores como «un rival endurecido». En ese sentido, sentenció que «les llegó el momento de tener que bancarse el vuelto».

Las duras declaraciones del presidente se dan en el marco de los recientes enfrentamientos con Longobardi, quien explotó de furia ante los ataques del denominado «brazo armado» libertario. Mientras que Feinmann fue blanco de Daniel Parisini, alias «El Gordo Dan», quien difundió datos privados sobre su pareja.

La escalada del jefe de Estado reaviva la tensión con un sector del periodismo que ha cuestionado duramente algunas de sus políticas de gobierno. Al mismo tiempo, alimenta la confrontación con quienes considera opositores, en una nueva muestra del tono beligerante que ha adoptado su gestión.