La situación en el estrecho de Taiwán se ha vuelto más tensa tras el despliegue de las Fuerzas Armadas de Taiwán en respuesta a las maniobras militares chinas. Este lunes, el Ejército Popular de Liberación (EPL) de China comenzó ejercicios que simulan el bloqueo y toma de control de áreas estratégicas de la isla, además de realizar ataques sobre objetivos tanto navales como terrestres. La Guardia Costera de Taiwán (CGA) ha denunciado estas acciones como «intimidatorias y amenazantes», subrayando que afectan la paz regional y buscan alterar el statu quo establecido por décadas.
Ante la creciente actividad china, la CGA detectó movimientos inusuales de embarcaciones, incluyendo la violación de la línea media del Estrecho de Taiwán, lo que generó la activación de un centro de emergencia para coordinar la vigilancia. En este contexto, las autoridades taiwanesas han instado a los barcos comerciales y pesqueros a aumentar su precaución. Mientras tanto, la Guardia Costera China justificó sus ejercicios como «patrullas de aplicación de la ley», reafirmando su postura acerca de la política de «una sola China».
El presidente de Taiwán, en medio de estos eventos, ha llamado a una reunión de seguridad nacional, donde se analizaron las estrategias de respuesta ante las maniobras chinas. En sus declaraciones, enfatizó que Taiwán y China «no están subordinados entre sí», reafirmando el compromiso de proteger la democracia y la libertad de la isla. A su vez, el Ministerio de Defensa taiwanés calificó las maniobras del EPL como «provocaciones irracionales» que incrementan la tensión en la región y aseguraron que sus fuerzas están en «máxima alerta».
Estos ejercicios militares, conocidos como Joint Sword-2024B, marcan la quinta vez que China realiza maniobras de esta magnitud desde 2022, en respuesta a lo que considera actos provocativos por parte de Taiwán. A pesar de las tensiones, el presidente taiwanés ha expresado su deseo de un diálogo “igualitario y respetuoso” entre ambas partes, mientras que China ha advertido que continuará aplicando «contramedidas» mientras Taiwán busque su independencia.