La Legislatura de Río Negro dio luz verde a dos iniciativas clave para impulsar la actividad hidrocarburífera en la provincia. Por un lado, avaló los contratos de exploración y explotación de áreas ubicadas en la Cuenca Neuquina. Al mismo tiempo, estableció un nuevo régimen de incentivos fiscales para las empresas que inviertan en esta industria.

Tras un extenso debate, los legisladores rionegrinos aprobaron por amplia mayoría los convenios exploratorios de hidrocarburos sobre diversos bloques de la Cuenca Neuquina adjudicados a diferentes operadoras nacionales e internacionales. Estos acuerdos tendrán una vigencia de 35 años y abrirán la posibilidad de desarrollar nuevos proyectos petroleros y gasíferos en distintas zonas de la provincia.

«Es un paso trascendental para Río Negro, que nos permitirá reactivar una actividad económica determinante y acceder a cuantiosas inversiones que generarán más puestos de trabajo», explicó el diputado oficialista que impulsó la iniciativa.

En paralelo, la Cámara también le dio el visto bueno al Régimen de Inversión para la Generación de Hidrocarburos (RIGI), un paquete de beneficios impositivos destinado a promocionar la llegada de nuevos capitales para exploraciones y explotaciones petroleras y gasíferas. Las empresas que se radiquen gozarán de estabilidad fiscal por 30 años.

Desde la oposición valoraron la sanción de este marco regulatorio, aunque advirtieron que «es necesario garantizar los más altos estándares ambientales para que esta actividad no contamine las cuencas y campos rionegrinos».

Con estas normativas, Río Negro espera reactivar una de las actividades económicas más relevantes para sus arcas fiscales y posicionarse nuevamente en el mapa de las inversiones hidrocarburíferas en la región de Vaca Muerta.