El gobierno argentino se encuentra en la fase de definición del temario para las sesiones extraordinarias que se convocarán en el Congreso en las próximas 48 horas. Sin embargo, ha surgido la posibilidad de que el Presupuesto no sea incluido en la agenda, lo que ha generado preocupación entre las provincias que esperan la aprobación de fondos. La Casa Rosada ha decidido no ceder ante la presión de los gobernadores, quienes solicitan la inclusión de la coparticipación de varios fondos en el proyecto.

El oficialismo y sus aliados legislativos tienen en mente varios proyectos que buscan avanzar, algunos de los cuales ya cuentan con dictamen, mientras que otros aún están en discusión en comisiones. Entre las iniciativas prioritarias se encuentra la eliminación de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), así como los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García Mansilla para la Corte Suprema de Justicia. Por su parte, el PRO también busca discutir temas como la Ficha Limpia y reformas en las leyes de reincidencia y votación de argentinos en el exterior.

La situación con el Presupuesto es crítica, ya que el gobierno no ha logrado llegar a un acuerdo con las provincias sobre la distribución de fondos. Los gobernadores han solicitado una reunión para discutir el tema, pero la Casa Rosada ha mostrado resistencia, argumentando que no hay posibilidad de un acuerdo. Esta postura se basa en el principio de «déficit cero», y el gobierno ha dejado entrever que podría prorrogar el Presupuesto de 2023 si no se llega a un entendimiento.

A pesar de los reclamos de los mandatarios provinciales, el gobierno mantiene firme su decisión de no modificar su postura respecto a los pedidos de coparticipación. Los gobernadores de Juntos por el Cambio han expresado su preocupación, argumentando que la aprobación de un nuevo Presupuesto es esencial para consolidar la confianza de los mercados y avanzar en la lucha contra la inflación. Sin embargo, el oficialismo parece decidido a avanzar con su agenda sin ceder ante las demandas provinciales.

En este contexto, el gobierno se tomará las próximas horas para definir el temario que se debatirá durante diciembre, un proceso que solo el Poder Ejecutivo tiene la autoridad para establecer. La incertidumbre sobre la inclusión del Presupuesto y otros temas clave continúa generando tensiones en el ámbito político.