El gobierno argentino ha confirmado que su sitio oficial fue objeto de un ciberataque que afectó tanto a la plataforma Mi Argentina como a la aplicación SUBE. Durante la noche del miércoles, los ciberdelincuentes lograron modificar el contenido de estas páginas, incluyendo mensajes ofensivos dirigidos al presidente Javier Milei. La Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología del país no solo confirmó el hackeo, sino que también criticó la falta de inversiones en ciberseguridad, señalando que este incidente pone de manifiesto las deficiencias en la infraestructura digital heredadas de administraciones anteriores.

El ataque, que duró aproximadamente una hora, impidió a los usuarios acceder a información y realizar trámites en los portales afectados. En lugar del contenido habitual, los visitantes se encontraron con videos y mensajes burlones que cuestionaban la seguridad del sitio, como el mensaje “really? hacked again!?” (¿de verdad? ¿hackeado de nuevo?). Este tipo de ataques no es nuevo para el gobierno, ya que a principios de año se había producido una violación de datos relacionada con las licencias de conducir.

Desde la Secretaría, se enfatizó la necesidad urgente de invertir en ciberseguridad para fortalecer la infraestructura digital del país. Se apuntó a los legisladores que no aprobaron un decreto que permitiría una mayor inversión en este ámbito, sugiriendo que su falta de acción contribuyó a la vulnerabilidad del sistema. La situación se complica aún más dado que no se ha especificado si hubo filtraciones de datos sensibles durante el ataque, aunque se recomendó a los usuarios cambiar sus contraseñas como medida de precaución.

El hacker, identificado como “gov.eth”, es conocido en el ámbito del hacktivismo y ha dejado claro que su objetivo es exponer las fallas en la seguridad informática del gobierno. Este ataque no solo resalta la fragilidad de los sistemas gubernamentales, sino que también plantea serias preguntas sobre la capacidad del estado para proteger la información de sus ciudadanos.

En conclusión, el hackeo del sitio oficial del gobierno argentino no solo es un llamado de atención sobre la ciberseguridad, sino también un recordatorio de la importancia de la inversión en tecnología para proteger la infraestructura crítica del país. La falta de acción en este sentido podría tener consecuencias graves en el futuro.