Parlamentarios chilenos alcanzaron un acuerdo para realizar un nuevo proceso constituyente, que permitirá redactar una nueva Carta Magna que reemplace a la heredada de la dictadura de Augusto Pinochet, un hecho que fue saludado hoy por el presidente Gabriel Boric y definido como una “segunda oportunidad” y un paso “necesario”, tres meses después de que la ciudadanía rechazara en un plebiscito una anterior propuesta de Constitución.

“Acuerdo por Chile” es el nombre del pacto al que llegaron anoche las diferentes fuerzas parlamentarias y que indica que el proceso estará a cargo de un Consejo Constitucional de 50 miembros elegidos por voto popular, que tendrán por único objeto discutir y aprobar una propuesta de texto de nueva Constitución, y de una Comisión Experta de 24 personas designadas por el Congreso.

El primer proceso constituyente fue rechazado el pasado 4 de septiembre, cuando la propuesta redactada por la Convención Constitucional, órgano compuesto por 155 miembros elegidos por votación popular, fue rechazada en el plebiscito de salida con un contundente 61% de los votos.