El presidente chino viene manteniendo encuentros protocolares de unos 20 minutos con los mandatarios que se encuentran en el país para la inauguración de los Juegos Olímpicos de Invierno, pero con Fernández el encuentro se extendió durante casi una hora.

La reunión entre el presidente Alberto Fernández y su par de China, Xi Jinping, estuvo plagada de anécdotas, elogios y momentos distendidos, según revelaron fuentes oficiales que integran la comitiva de la gira internacional que lleva adelante el mandatario argentino.

«Si usted fuera argentino, sería peronista», le dijo Fernández al líder chino cuando la reunión de casi hora una hora en el Gran Palacio del Pueblo estaba concluyendo, lo que despertó las risas y coronó un encuentro que fue calificado por los voceros como distendido y muy cordial.

Con la mayoría de los mandatarios que se encuentran en China para participar de la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de invierno que se desarrolló el viernes, Xi viene manteniendo encuentros protocolares de unos 20 minutos, pero con Fernández el encuentro se extendió durante casi una hora.

«Se quedaron charlando con mucho entusiasmo», revelaron las fuentes que indicaron que el encuentro -que se inició aproximadamente a la 1 de la madrugada argentina de este domingo- comenzó protocolarmente, con los agradecimientos mutuos al cumplirse 50 años de las relaciones diplomáticas entre ambos países, que se cumplen este mes.

 

Alberto Fernández rompió el hielo y pegaron buena onda con Xi

Pero el clima de la cumbre comenzó a distenderse cuando el jefe de Estado argentino le compartió a Jinping una anécdota: en los años ’50 el presidente argentino Juan Domingo Perón le pidió a su ministro de Economía que gestionara el envío de alimentos a China.

Tras ese relato, la reunión se distendió y comenzaron un diálogo «muy cordial» en el que Fernández le agradeció la cooperación en el marco de la pandemia de coronavirus, con el envío de vacunas chinas Sinopharm a la Argentina, contaron las fuentes.