El proyecto quedó en condiciones de ser tratado en el recinto tras un plenario de comisiones en el que hubo tensos cruces. Expusieron Moroni y Raverta.
El proyecto que prevé una nueva fórmula para actualizar los haberes de los jubilados, con actualizaciones cada tres meses, recibió dictamen favorable y quedó en condiciones de ser tratado en el recinto del Senado tras un plenario de comisiones en el que hubo tensos cruces entre el oficialismo y la oposición.
Durante el plenario de las comisiones de Trabajo y Presupuesto, expusieron el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, y la directora ejecutiva de la Anses, María Fernanda Raverta, quienes defendieron la nueva norma y afirmaron que logrará que los haberes del sector pasivo aumenten por encima de la inflación.
Moroni ratificó que los períodos de actualización de haberes previsionales será trimestral y no semestral y afirmó que lo que se busca con la nueva ley de movilidad jubilatoria es que «el 75 por ciento de los haberes previsionales terminen el año levemente arriba o empatando con la inflación», algo que «no ocurría desde hace muchos años», según evaluó.
«En una situación inédita, en el peor año de la historia económica argentina, hemos conseguido que el 75 por ciento mantenga o mejore sus haberes, es un gran éxito, no un fracaso», dijo ante un plenario de comisiones del Senado, y subrayó que se contempla «un incremento de 34,9 por ciento por encima de la inflación».
El ministro explicó que se trata de un proyecto «superador», que busca «mejorar el poder adquisitivo a los sectores de bajos ingresos».
Moroni precisó que la fórmula que se adoptará, a la que se arribó luego de un intercambio de opiniones, según explicó, implicará «unir la experiencia histórica de la fórmula de 2008, el período de mayor incremento de haberes previsionales».
«Volveremos a incorporar el índice de variación salarial como uno de los componentes y el periodo de ajuste semestral va a pasar a ser trimestral», ratificó.
El ministro indicó que con la nueva ley se otorgará «un 8 por ciento adicional a los haberes de más de cuatro millones de beneficiarios» y aclaró que «ninguna fórmula de actualización funciona en el vacío».
Un nuevo capítulo en las intervenciones de Raverta
La directora de Anses explicó con filminas que la fórmula aplicada por el ex presidente entre 2017 y 2019 provocó una pérdida de hasta 20% en el poder adquisitivo. «Lo que hicieron fue perder contra la inflación; con nuestra fórmula, le ganamos«, resaltó, con algún grado de soberbia, la funcionaria.
En buenos términos el radical Julio Cobos le recriminó haber medido sólo el aumento de jubilaciones mínimas. «Las demás subieron hasta el 20%, mientras que con la fórmula anterior hubieran crecido el 42.2%. Hubo un ahorro de 100 mil millones de pesos. Me sorprende que no hagan esa comparación. Si tiene una fórmula mejor, usen la anterior como base», sugirió.
«No se preocupen por la forma agresiva hacia las mujeres en la política argentina. Sepan que vamos a contestar siempre con ternura y mucha convicción, porque nos asiste la razón y el esfuerzo diario de ver a una Argentina de iguales», cerró su presentación la funcionaria.
No la pasó muy bien la funcionaria que ya viene de dar las malas noticias para luego ser descalificada por Cristina y posteriormente por el Presidente, quien se sumó a las buenas noticias gestadas por la ex presidenta.
Lousteau reclamó la falta de un cálculo actuarial para definir los incrementos. «Estamos tocando el 10% del PIB», dimensionó.
Citó diarios de sesiones de los últimos 25 años en los que se omitían esos datos y aún así definieron fórmulas de movilidad y moratorias. «Durante la pandemia me pregunté qué hubiera sido de los jubilados si no existían esas moratorias», ironizó Raverta. Lousteau la cruzó enojado. «¡Está tergiversando mis dichos! ¡Lo único que pido es que mandan los datos! ¡Manden los datos y dejen el verso!».