Tras dos días con cifras superiores a las que venían reportando, el gobierno anunció nuevas restricciones en la ciudad de Rivera.
Uruguay registró esta semana los peores datos de contagios de coronavirus desde el inicio de la pandemia, lo que llevó al gobierno de Luis Lavalle Pou a anunciar una serie de restricciones en ciertas zonas fronterizas con Brasil para tratar de controlar los rebrotes.
Desde que Uruguay decretó la emergencia sanitaria, el 13 de marzo último, las autoridades sanitarias contaron 2.663 positivos, de los cuales 53 corresponden a pacientes fallecidos y 440 a casos activos.
Tras dos días con cifras superiores a las que venían reportando (64 el martes, 44 el miércoles), el gobierno anunció nuevas restricciones.
Las autoridades sanitarias contaron 2.663 positivos, de los cuales 53 corresponden a pacientes fallecidos y 440 a casos activos
Rivera, pegada a la frontera brasileña y donde se acumulan más de 120 casos activos, declaró el miércoles el alerta naranja y decidió suspender los grandes eventos, ampliar el uso de mascarillas y limitar el número de personas que pueden ingresar a los comercios.
Tras visitar esa ciudad ubicada en el norte del país, el ministro de Salud, Daniel Salinas, admitió que entre los uruguayos puede haber una «sensación irreal de seguridad», al referirse a las imágenes de playas y reuniones de personas que aparentemente contravienen las recomendaciones para controlar la pandemia.
Si bien admitió que los uruguayos están cansados de las restricciones, Salinas llamó a evitar los espectáculos públicos y las aglomeraciones, así como también la asistencia a los centros escolares de Rivera.
En dicha ciudad también se decidió suspender las cirugías que no sean urgentes para priorizar, en cambio, las atenciones extrahospitalarias.
Además, con el objetivo de evitar posibles ingresos a Uruguay de personas contagiadas con el coronavirus, se desplegarán efectivos del Ejército nacional en la frontera.