Quienes se dedican a la actividad se quejaron por la decisión de la Legislatura porteña que reformó el Código Contravencional para imponerles multas.
Algunos hombres que se dedican a pedir una contribución monetaria a los automovilistas que dejan sus autos en zonas de libre estacionamiento de la ciudad de Buenos Aries se quejaron hoy por la prohibición a esa actividad dispuesta por la Legislatura que reformó el Còdigo Contravencional porque interpretaron que los «ponen a todos en la misma bolsa».
«Nosotros no vamos a eventos ni a la cancha. No somos los que cobran 400 o 500 pesos, sino que pedimos una colaboración a voluntad, sin presionar», se justificó en diálogo con Télam uno de ellos, que realizaba la actividad en avenida Libertador a la altura del hipódromo.
El nuevo Código Contravencional porteño, aprobado ayer por la Legislatura, impone multas a quienes «ofrecen o prestan» servicios de estacionamiento en vía pública y penas que pueden llegar a días de arresto en caso de que la actividad sea realizada por una organización, así como la exoneración de policías que la permitan.