El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, anunció que el gobierno modificará la metodología para medir la inflación, apenas cinco días después de que se conociera el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de marzo, que registró un aumento del 3,7%. El anuncio se produjo en el marco de su informe ante la Cámara de Diputados, donde respondió a una de las 4 mil preguntas formuladas por los legisladores.
La decisión generó interrogantes entre los diputados, especialmente por parte de los radicales Pablo Juliano y Martín Tetaz. Juliano cuestionó si el cambio respondía al descontento del gobierno con el último indicador de marzo, mientras que Tetaz señaló que la estructura de ponderadores utilizada para medir la inflación data de 2004 y no refleja la realidad actual.
Tetaz recordó que existe una encuesta de 2017 que podría utilizarse para actualizar los ponderadores, y preguntó si estos cambios se implementarían antes de las próximas elecciones. Para ilustrar la importancia de esta actualización, el diputado radical señaló que los salarios reales muestran una evolución diferente según los ponderadores que se utilicen.
Francos explicó que, si bien el titular del INDEC, Marco Lavagna, había planteado la necesidad de cambiar algunos ponderadores, el presidente Javier Milei se opuso a realizar modificaciones en este momento para evitar suspicacias sobre la manipulación de las cifras de inflación.
Durante su exposición, Francos también respondió a una pregunta de Juliano sobre el precio del maple de huevos, revelando que, como productor de huevos, lo vende a 5 mil pesos, mientras que en el comercio se consigue a 8 mil.
La presentación de Francos transcurrió sin mayores sobresaltos, a pesar de las dudas iniciales sobre el quórum y la intención de algunos sectores de evitar preguntas sobre el caso Libra. De hecho, el jefe de Gabinete no fue cuestionado por este tema, ya que se acordó que será objeto de una interpelación el próximo martes.