Carlos Bianco, ministro de Gobierno de la provincia de Buenos Aires y estrecho colaborador del gobernador Axel Kicillof, se vio envuelto en un incidente durante la madrugada del domingo. En un control de tránsito realizado en la Autopista Buenos Aires-La Plata, Bianco se negó a someterse a un test de alcoholemia, lo que derivó en la retención de su licencia de conducir.
Según el acta labrada por personal de Seguridad Vial, el hecho ocurrió alrededor de la 1 de la madrugada, cuando Bianco circulaba en un Volkswagen Vento perteneciente al gobierno provincial. Al ser requerido para realizar la prueba de alcoholemia, el ministro se negó y, según trascendió, habría solicitado que no se filmara la situación.
Ante la negativa de Bianco, los agentes de tránsito procedieron a labrar el acta correspondiente, considerando el caso como «presunto positivo». En consecuencia, se retuvo la licencia de conducir del ministro, aunque no se secuestró el vehículo oficial.
Este incidente ocurre en el marco de la Ley de Alcohol Cero, que rige en la provincia de Buenos Aires y prohíbe a los conductores circular con cualquier nivel de alcohol en sangre. Casualmente, Bianco había suspendido sin explicaciones la conferencia de prensa que brinda habitualmente los lunes por la mañana.
Este hecho se suma a la tensión política existente en la provincia, luego de que Kicillof anunciara el desdoblamiento de las elecciones provinciales, una decisión que generó fuertes críticas dentro del kirchnerismo y podría derivar en un enfrentamiento electoral entre Cristina Fernández de Kirchner y el propio Kicillof.