Horacio Rodríguez Larreta ha concretado un acuerdo significativo con Graciela Ocaña de cara a las elecciones porteñas, lo que marca una ruptura con el frente Vamos Juntos. Este movimiento se produce en un contexto electoral donde las alianzas y la estrategia son cruciales para captar el voto de los ciudadanos.

Con este acuerdo, Larreta lanza su candidatura a legislador y suma a Ocaña a su equipo, lo que indica un cambio en la dinámica política de la Ciudad de Buenos Aires. La decisión de romper con Vamos Juntos implica que todos los socios de este frente competirán en espacios separados, lo que podría dividir la oferta electoral y beneficiar a otros partidos.

El radicalismo, por su parte, planea presentar una lista que posiblemente incluya al socialismo, mientras que la Coalición Cívica también competirá de manera independiente del PRO. Esta fragmentación podría complicar la situación para el oficialismo, que deberá enfrentar una competencia más dispersa.

Además, en el ámbito del peronismo, no se ha logrado un acuerdo con el Movimiento Evita, que también se presentará con una lista propia, liderada por Juan Manuel Abal Medina. Esto sugiere que las elecciones en la Ciudad de Buenos Aires estarán marcadas por una alta competitividad y una fragmentación de las fuerzas políticas.

Con la inclusión de figuras como María Eugenia Vidal, Lombardi y Laura Alonso en las listas del PRO, Larreta busca consolidar su posición y atraer a un electorado que podría estar buscando alternativas en un panorama electoral cambiante. La estrategia de Larreta y Ocaña será clave para determinar el rumbo de las elecciones y la capacidad del PRO para mantener su relevancia en la política porteña.