El Gobierno redujo la edad mínima para la portación de armas a 18 años, a través de un decreto firmado por el presidente Javier Milei. Esta modificación afecta al artículo 55 de la Ley Nacional de Armas y Explosivos, que anteriormente establecía que solo los mayores de 21 años podían adquirir y portar armas de uso civil.
La medida fue publicada en el Boletín Oficial y se enmarca dentro de un esfuerzo por armonizar la legislación vigente, reconociendo que los ciudadanos son capaces de ser usuarios legítimos de armas a partir de la mayoría de edad. El decreto, que lleva la numeración 1081/2024, también detalla una serie de requisitos que deben cumplir los solicitantes, como la ausencia de antecedentes penales y la aprobación de exámenes psicofísicos.
Desde el Gobierno se argumenta que esta decisión busca facilitar el acceso legal a la tenencia de armas, en un contexto donde se estima que hay más de 800,000 armas de fuego en posesión irregular en el país. Además, se busca promover un registro más transparente y moderno de las armas en circulación, así como combatir la delincuencia que utiliza armas ilegales.
El nuevo marco legal también incluye la posibilidad de extender el Programa Nacional de Entrega Voluntaria de Armas, que permite a los ciudadanos entregar sus armas de forma anónima para su destrucción, sin enfrentar consecuencias legales. Esta iniciativa pretende reducir la violencia y la circulación de armas en la sociedad.
Para obtener la Credencial de Legítimo Usuario, que habilita a las personas a portar armas, se deben cumplir varios requisitos, incluyendo la aprobación de un examen de idoneidad en el manejo de armas y la presentación de documentación que certifique la identidad y la situación legal del solicitante.