El gobernador bonaerense Axel Kicillof ha dado nuevos pasos para afianzar su posición como referente del peronismo opositor a la gestión de Javier Milei. El último homenaje a Perón en San Vicente lo volvió a colocar como una figura destacada, pero aún enfrenta desafíos para lograr la unidad del amplio espectro peronista.

Si bien Kicillof cuenta con el apoyo de un grupo de intendentes y funcionarios cercanos que conforman su mesa política, se topa con algunas resistencias en sectores como La Cámpora y el Frente Renovador de Sergio Massa. Estos espacios, si bien mantienen diálogo con el gobernador, no lo reconocen aún como el único conductor del peronismo.

La falta de una conducción definida en el PJ nacional complica el panorama. Mientras algunos dirigentes esperan que Kicillof asuma ese liderazgo, desde La Cámpora advierten que es «demasiado pronto» pensar en una candidatura presidencial del mandatario provincial.

Por el momento, Kicillof sigue reconociendo a Cristina Kirchner como su referente, sin dar muestras de autonomía total. Esto genera cierta incertidumbre sobre quién debería encabezar la estrategia electoral del peronismo para 2024.

Paralelamente, el gobernador tiende puentes con otros mandatarios provinciales, como Sergio Ziliotto de La Pampa y Martín Llaryora de Córdoba, en una búsqueda de ampliar sus alianzas. Pero aún le falta consolidar su posición como el principal referente del espacio opositor.