Un poderoso terremoto de magnitud 7,2 sacudió la isla de Taiwán, provocando daños en edificios y otras infraestructuras. Además, se emitieron alertas de tsunami tanto en Taiwán como en las islas japonesas de Okinawa y en Filipinas. El sismo provocó el colapso de dos edificios en la ciudad de Hualian, donde se cree que hay personas atrapadas. Las autoridades pidieron a los ciudadanos estar atentos a posibles réplicas y tomar precauciones. El epicentro del terremoto se situó en el mar, a 25 kilómetros al sureste de la costa del condado de Hualien. Se registraron cientos de heridos y se emitieron órdenes de evacuación en Japón y Filipinas. Es considerado el más fuerte en 25 años y se sintió en todo el país.
El terremoto generó una serie de réplicas, incluyendo una de magnitud 6,5 y varias de magnitudes menores. El alcalde de Taipéi declaró el nivel dos del centro de respuesta a desastres en la ciudad y se desplegaron equipos de emergencia para realizar labores de socorro. Dos edificios colapsaron y se reportaron daños en carreteras y en la autopista Suhua. El principal aeropuerto de Okinawa suspendió los vuelos debido al riesgo de tsunami. Las autoridades japonesas emitieron órdenes de evacuación para cerca de 500.000 personas. Aunque la amenaza de tsunami fue rebajada, se recomienda precaución en las zonas costeras.
Las autoridades taiwanesas, japonesas y filipinas emitieron alertas de tsunami para sus regiones costeras. Afortunadamente, las primeras olas del tsunami no fueron tan grandes como se esperaba. Sin embargo, se registraron daños en viviendas y se reportaron cientos de heridos. Las autoridades instaron a los ciudadanos a revisar si había fugas de gas y a tomar precauciones ante posibles réplicas. Los equipos de emergencia están trabajando en las labores de rescate y ayuda a los afectados.