Miles de trabajadores estatales despedidos en Argentina estarían preparándose para ingresar por la fuerza a los ministerios y otras dependencias estatales en un acto de protesta. La comisión directiva de ATE Capital ha decidido que los trabajadores despedidos ingresen a sus puestos de trabajo con el apoyo de los delegados gremiales. Según Manuel Sueiro, secretario general adjunto de ATE Capital, se espera que todas las comisiones internas se presenten en los lugares de trabajo y que los cuerpos de delegados se reúnan en un plenario de secretarios generales. Los despidos se han llevado a cabo con «desconocimiento y brutalidad», según Sueiro, y se estima que durante el fin de semana largo se producirán alrededor de 15,000 despidos.

La respuesta del gobierno ante esta situación de protesta es incierta. La CTA teme que la Casa Rosada pueda responder desplegando fuerzas policiales en los ministerios y secretarías de Estado. Además, se ha criticado la tercerización de la ejecución del ajuste, argumentando que empresas como Techint y el grupo Eurnekian están ocupando la mayoría de las dependencias del Estado nacional. En el Ministerio de Economía y otras reparticiones del Gabinete, los despidos están siendo ejecutados por personas afines a Luis «Toto» Caputo.