El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, admitió que siete empleados de la organización World Central Kitchen (WCK) murieron en un bombardeo israelí «no intencional» en Gaza. Netanyahu expresó sus condolencias y declaró: «Esto sucede en una guerra (…), estamos en contacto con los gobiernos y haremos todo lo posible para que no se vuelva a producir». Las víctimas, la mayoría extranjeros, viajaban en un vehículo de WCK que resultó destruido en el ataque. La oenegé, fundada por el chef hispano-estadounidense José Andrés, ha suspendido sus operaciones en Gaza tras este trágico suceso. Diversos líderes mundiales han condenado el ataque y exigido a Israel que aclare las circunstancias del mismo.

El incidente ocurrió el martes (02/04/2024) y Netanyahu hizo su declaración desde el hospital, donde se encontraba recuperándose de una operación de hernia. Según sus palabras, el bombardeo fue «no intencional» y se produjo durante el contexto de una guerra. La oenegé WCK ha estado entregando ayuda alimentaria en Gaza y las víctimas eran trabajadores de esta organización humanitaria. Entre ellos se encontraban ciudadanos de Australia, Polonia, Reino Unido, Estados Unidos, Canadá y Palestina.

La noticia ha generado una gran conmoción a nivel internacional, con líderes y representantes gubernamentales condenando el ataque y exigiendo una investigación transparente por parte de Israel. La organización WCK ha interrumpido sus operaciones en Gaza como resultado de este incidente. El portavoz militar israelí, el contraalmirante Daniel Hagari, se puso en contacto con José Andrés, fundador de WCK, para expresar sus condolencias y aseguró que se llevará a cabo una investigación transparente.