En una sesión legislativa en la provincia de Buenos Aires, el gobernador Axel Kicillof se quedó sin la autorización de endeudamiento que necesitaba urgentemente para poder costear el aguinaldo de diciembre. Tras varios días de negociaciones, no se logró consenso para aprobar una autorización de deuda por USD 150 millones. La oposición, encabezada por el PRO, bloqueó la medida, culminando en el fracaso de las negociaciones. Desde el gobierno responsabilizaron al PRO por su postura dura, pero evitaron criticar al radicalismo. Esta falta de acuerdo podría generar dificultades para la gobernabilidad de Kicillof en el futuro.
Los intendentes de la oposición exigieron al gobierno de Kicillof que cancele la totalidad de la deuda que mantiene con los municipios, que asciende a unos 16.000 millones de pesos. Durante las negociaciones, los alcaldes solicitaron ver el dinero en las cuentas de los municipios antes de dar la orden a los legisladores para que aprueben el endeudamiento. Sin embargo, el gobierno no cumplió con esta condición, lo que llevó al rechazo de la oposición. El PRO, la UCR y los libertarios descartaron acompañar el pedido de endeudamiento del gobernador, lo que llevó al fracaso de la medida.
Esta falta de acuerdo para el endeudamiento necesario para pagar los aguinaldos pone al gobernador Kicillof en una situación complicada. La sesión legislativa era crucial para que los diputados pudieran sesionar y convertir en ley la autorización de endeudamiento. El gobernador había solicitado USD 150 millones para destinar al pago de los aguinaldos y a la reprogramación de deudas de los municipios. Sin embargo, la falta de consenso y el bloqueo de la oposición ponen en riesgo la capacidad de Kicillof para cumplir con estos pagos y mantener la estabilidad financiera en la provincia.