En un movimiento estratégico, Jorge Macri, candidato de Juntos, ha decidido retrasar cualquier definición sobre su integración a la Unión Cívica Radical (UCR) hasta después de las elecciones de octubre, específicamente, hasta conocer si habrá un eventual balotaje. Esta decisión ha generado incertidumbre en el ámbito político, ya que las negociaciones por los puestos en un potencial gabinete jorgemacrista aún no han comenzado. Mauricio quieren un gobierno 100% PRO.

En el entorno de Juntos, han señalado que actualmente no se está discutiendo nada en relación a esta cuestión. Sin embargo, se espera que Jorge Macri evalúe su inclusión en el partido una vez que se defina el panorama electoral y se conozca si triunfan otros candidatos como Javier Milei, Patricia Bullrich o Sergio Massa.

La importancia de la decisión de Jorge Macri radica en la posibilidad de un balotaje. Si no logra obtener la victoria en primera vuelta, el apoyo de los socios radicales se volverá crucial. La UCR ya tiene definidas sus bancas legislativas y comunas, lo que le otorga una posición de fuerza en el escenario político. En caso de haber balotaje, el respaldo de los radicales podría ser determinante para el éxito de Jorge Macri en la contienda electoral.

Sin embargo, el panorama legislativo presenta desafíos para Juntos. En caso de obtener un porcentaje de votos del 45%, el PRO solo contaría con 11 legisladores «puros», lo que no sería suficiente para frenar un juicio político. Esto lleva a especular sobre la postura de Mauricio Macri, quien ha mostrado cierta aprehensión hacia el radicalismo y podría influir en las decisiones futuras de Jorge.