Durante la promulgación de la Ley TEA en La Moneda, el presidente Gabriel Boric recibió un regalo inesperado que causó risas y alegría en la audiencia. Se trató de un peluche de Winnie The Pooh.
El mandatario mostró el regalo con entusiasmo y se rió mientras explicaba la referencia a la audiencia. El peluche es un guiño a una rutina cómica de Fabrizio Copano, quien comparó al presidente con el oso por su aspecto «tierno y amable», en contraste con otros líderes del mundo.
El momento fue muy divertido y sirvió para distender un evento que, por lo general, puede ser bastante formal y serio. La reacción de Boric demuestra su buen humor y su capacidad para disfrutar de las bromas y los momentos de relajación.
La promulgación de la Ley TEA es una medida importante para mejorar la calidad de vida de las personas con Trastornos del Espectro Autista, y es un tema que merece toda la atención y el respeto. Sin embargo, el regalo inesperado de Winnie The Pooh fue un toque de humor que permitió que el evento fuera más ameno y entretenido.