El Gobierno salió este viernes a aclarar que la extitular del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI), Victoria Donda, en realidad renunció porque había “perdido la confianza” del presidente Alberto Fernández, y no como una decisión propia, tal y como ella había explicado públicamente en la noche de este jueves tras conocerse la noticia.
“Ante las declaraciones hechas por la Dra. Victoria Donda acerca de las razones que le expresara este Secretario de Gabinete sobre la decisión del Presidente de no renovar su intervención al frente del INADI, es necesario aclarar que los motivos transmitidos en dicha conversación fueron la pérdida de confianza del titular del Poder Ejecutivo en la capacidad de la Dra. Victoria Donda de seguir al frente de la gestión de dicho organismo; motivo por el cual la funcionaria tomó la decisión de renunciar 48 hs antes de la finalización de su mandato”, se detalló en una comunicación que se hizo desde la vicejefatura de Gabinete, que encabeza Juan Manuel Olmos, uno de los funcionarios de mayor confianza de Fernández.
De este modo, el Gobierno buscó aclarar que en realidad no se trató de un portazo de Donda, sino de una decisión forzada por la determinación del Presidente de prescindir de su tarea al frente del organismo que presidía.