La dirigente Milagro Sala advirtió este viernes que pronto será traslada a una unidad del servicio penitenciario local por un requerimiento de cumplimiento «inmediato» de la justicia de Jujuy que se contrapone con lo dispuesto por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que abogó a favor de la condición de prisión domiciliaria.

Sala goza de prisión domiciliaria en su propiedad con pileta, lujos y provilegios que no tiene ningún delincuente común en Argentina.

El pedido de detención fue formulado apenas conocido el jueves el fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que dejó firme una condena a 13 años de prisión dictada contra la dirigente en 2019 por el Tribunal Oral Criminal 3 de Jujuy, en causa conocida como «Pibes Villeros».

“La orden ya está lista para que me vengan a detener entre hoy, mañana o pasado, y me lleven nuevamente a la cárcel. No se está respetando la resolución de la CIDH”, denunció este viernes la dirigente a través de un breve vídeo publicado en las redes sociales.