Pulsa «Intro» para saltar al contenido

Ante miles de radicales, Posse mostró sus credenciales para pelear la gobernación

Gustavo Posse fue el único orador en un multitudinario acto radical en Mar del Plata, la segunda ciudad más grande en electores de la provincia de Buenos Aires después de La Matanza. Recibió un fuerte respaldo de la militancia y quedó claro su potencial para pelear la gobernación bonaerense.

El intendente de San Isidro es una de las figuras más importantes del radicalismo. Su peso en la estructura partidaria bonaerense y su trayectoria lo posicionan en ese lugar.

Posse es un líder político que piensa el presente y el futuro desde una base política/ideológica puramente radical. Es el único que piensa el radicalismo como eje natural de la coalición, a diferencia de muchos referentes que piensan el radicalismo en función del PRO.
Por su temple político, asume responsabilidades con la intención de lograr sus objetivos. No teme a exponerse, quiere participar, y como todo líder político sabe que al final de cada batalla puede haber victorias o derrotas, pero tiene claro que cuenta con todas las cartas que lo posicionan como un sólido candidato.

Claramente es un político que decide jugar para hacer trascender sus ideales y posicionar a su partido. No decide en función a su conveniencia personal. Cree firmemente que la forma ideal de saber quién es mejor representante es poniéndose a consideración de los vecinos. Tan simple como eso.

Su sangre radical le ha permitido lograr algo que ningún otro correligionario ha podido: Es intendente de un municipio del conurbano, tiene un bloque propio en la legislatura bonaerense (Espacio Abierto Juntos) y bloques de concejales en 20 distritos de la provincia de Buenos Aires.

Casi el cincuenta por ciento de los delegados partidarios provinciales son de Posse. La realidad deja en claro que Posse no se acerca al radicalismo. Posse és el radicalismo más sólido en torno a un líder y su volúmen político será fundamental si el radicalismo pretende ganar en las PASO la candidatura por la gobernación bonaerense.

El domingo pasado, el possismo marplatense organizó un acto en conmemoración de los 131 años del partido radical. Hacía años que no se veía una concurrencia y espíritu partidario como el que se vivió ese día en la segunda ciudad con más habitantes de la provincia de Buenos Aires después de La Matanza. Lejos del conurbano, lejos de la Capital, su convocatoria también es fuerte.

¿Quiere ser gobernador de la provincia de Buenos Aires? le preguntó un periodista. «Si me preguntan si estoy calificado para ser gobernador de la Provincia de Buenos Aires les digo que sí» afirmó, restando importancia a lo que quiera ser para dejar en claro que lo importante es saber para qué y tener con qué.

En una fuerte señal de abrir el juego pensando en encontrar al mejor candidato o candidata, en una conferencia de prensa aclaró: “Hay muchos intendentes que califican perfectamente, que tienen capacidad de gestión, años de comprobada experiencia y virtudes suficientes para ser candidato; yo me siento calificado para serlo”.

“Vamos a trabajar para tener un presidente y un gobernador de la provincia de Buenos Aires radicales. Nuestro plan de gobierno es el de la sociedad. En cada lugar de nuestro país, el radicalismo es el motor de Juntos por el Cambio”, señaló Posse desde un escenario montado sobre la calle y ante miles de personas.
“Queremos un radicalismo protagonista, que logre transformar a la provincia de Buenos Aires en una provincia distinta a la que es hoy y que luche para solucionar los problemas de los argentinos”, afirmó.