El Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires comenzó la entrega de concentradores de oxígeno, oxímetros de pulso y tubos a los bonaerenses sin cobertura de obras sociales que, por la patología que padecen, requieren de estos insumos vitales.
La pandemia puso en evidencia la escasez de proveedores de oxígeno en el sector privado, un recurso esencial para los pacientes a los que el virus afectó, especialmente, en su función respiratoria. Además, este insumo es fundamental para tratar numerosas patologías, entre ellas la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), la fibrosis quística y enfermedades oncológicas.
A raíz del aumento en la demanda de oxígeno, el Estado bonaerense decidió reforzar el programa de Oxigenoterapia Domiciliaria, que depende de la Dirección Provincial de Redes y Regiones a los fines de complementar la provisión que aporta el sector privado, con el objetivo de garantizar el acceso oportuno a la salud de todas las personas que lo requieran.
El ministerio que conduce Nicolás Kreplak comenzó a entregar en cada domicilio de la región sanitaria XI (con cabecera en La Plata) concentradores de oxígenos, tubos de uso domiciliario (para situaciones en que se vea afectado el suministro eléctrico), oxímetros de pulso y tubos de traslado a personas que dependen de la oxigenoterapia ya sea para su sobrevida o bien para mejorar su calidad de vida.
En concreto, como parte de un plan global que contempla a todo el sistema de salud pública, se recuperaron las plantas de los hospitales provinciales Iriarte de Quilmes y San Roque de Gonnet, que estaban paralizadas, y se generaron otras 10 plantas de producción y almacenaje de oxígeno.
También se adquirieron 2.000 tubos de oxígeno (1.000 con regulador), 5.000 concentradores de oxígeno, 33.000 medidores de CO2 y 17 compresores industriales para oxígeno. Desde la cartera sanitaria suministrarán los insumos domiciliario que sean necesarios y harán un seguimiento integral de la persona en tratamiento y de su grupo familiar.