El fiscal del equipo especial Lava Jato, José Domingo Pérez, abrió este viernes la presentación al juez de las 1.900 pruebas que dice haber reunido contra la excandidata Keiko Fujimori y el partido que encabeza, Fuerza Popular, por presunta financiación ilegal de su campaña a las presidenciales de 2011, causa por la que ya había pedido 30 años de cárcel para la exlegisladora.
Entre las evidencias que presentó el fiscal Pérez al juez Víctor Zúñiga está la serie de pagos irregulares que Fujimori habría recibido para su campaña a las presidenciales de 2011, como el millón de dólares aportado por la constructora brasileña Odebrecht, y los 15.000 dólares de Luis Calle Quirós, en la ‘lista negra’ del narcotráfico de Estados Unidos.
Para Pérez, Fujimori armó «una organización criminal», que se sirvió de «sus cuentas bancarias, en el Scotiabank, para realizar depósitos y transferencias» y a través del blanqueo de capitales pudo justificar todos esos ingresos y evadir los controles de las instituciones.
En esos ingresos también están los que realizaron el banquero Dionisio Romero, que reconoció aportes por 3,65 millones de dólares, el empresario chileno Juan Rassmuss y la patronal peruana Confiep, según detalla el diario limeño La República.
En el caso del millón de euros de Odebrecht, Pérez explicó que llegó a través de paraísos fiscales, a través del constructor Gonzalo Monteverde y su empresa Construmaq.
Ya en marzo Pérez había pedido 30 años de prisión para la entonces candidata presidencial y otras 40 personas, acusadas de lavado de activos, entre otros delitos.
Llevaba entonces dos años de investigaciones, y entre los acusados está también el esposo de Keiko Fujimori, Mark Vito.
