Acompañado por una masiva movilización de taxistas, el cuerpo deliberativo de la ciudad balnearia aprobó una ordenanza para imponer sanciones millonarias a los choferes de la empresa. Desde la aplicación reaccionaron enviando un mail a los usuarios con los números de teléfono de los concejales que votaron la iniciativa.
La guerra entre el municipio de Mar del Plata que conduce Carlos Arroyo y la empresa de transporte Uber estalló en la tarde de este jueves, luego de que el Concejo Deliberante de la localidad aprobara una ordenanza para imponer multar millonarias a los choferes de la aplicación.
Durante la sesión, que estuvo acompañada por una masiva movilización de taxistas en las calles, el cuerpo deliberativo aprobó la iniciativa enviada por Arroyo, que prevé multas de entre 10 y 90 salarios mínimos, es decir, hasta 918.000 pesos.
La respuesta de la aplicación, en tanto, fue enviar un correo electrónico a sus usuarios difundiendo los números de teléfonos de las oficinas de los ediles Guillermo Arroyo (PRO Atlántica), Alejandro Carrancio (CREAR), Marina Santoro (Unidad Ciudadana), Vilma Baragiola (UCR) y Guillermo Volponi (PRO), quienes votaron la ordenanza.
Asimismo, en el mail enviado ratificaron que «se quedan” en la ciudad y aseguraron que la propuesta aprobada busca «perseguir a quienes buscan una oportunidad de ingreso manejando con la aplicación», pese al «impacto positivo» que tiene.
Por su parte, el alcalde de Cambiemos celebró la sanción de la norma: “Estoy feliz, es un triunfo para Mar del Plata”, dijo el polémico intendente, que ayer había prometido “perseguir por cielo y tierra” a la empresa. Vale destacar que los argumentos públicos dados por el intendente demuestran un alto grado de ignorancia sobre el tema. Además, lo que expresa como preocupaciones por características negativas y «peligrosas» de utilizar Uber en realidad, dejal al descubierto la ineficacia del ejecutivo municipal en su mas básico rol de control, ya que es quien debe controlar que todos los vehículos que transitan por la ciudad tengan la VTV, seguro y conductores con registro correspondiente y parece que no es algo que Tránsito municipal haya podido lograr controlar.