La ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, aseguró que el diálogo con las organizaciones sociales «está abierto» pero el Gobierno no va a aceptar las «extorsiones» mediante los cortes de calles de Buenos Aires y otras ciudades.
«El diálogo está abierto, pero no cortando la calle. El que quiere pide una reunión en el Ministerio y nos sentamos a dialogar, pero de ninguna manera cortando calles», dijo en una entrevista que publica este domingo el diario La Nación.
La ministra aludió puntualmente al acampe que hizo en la avenida 9 de julio porteña, frente a la cartera de Desarrollo Social, un grupo de organizaciones sociales que responden al Polo Obrero.
«Este grupo vino de una manera muy clara a pedir planes o acampe. No había posibilidad de generar mecanismos de consenso. Yo dialogo con todos los sectores y los actores políticos más allá de los partidos, pero si algo tenemos que desterrar de la Argentina es el partidismo en la política social», apuntó.
Agregó que «frente a un año electoral muchos actores políticos quieren posicionarse políticamente», pero advirtió que «las cuestiones electorales se resuelven en las urnas y no cortando calles».
«Nuestro compromiso es desde el primer día desintermediar (sic) los planes sociales, transparentar los programas sociales y no vamos a dar marcha atrás. No vamos a dar planes para que las organizaciones tengan de rehén a la gente», remarcó.
Stanley dijo que es necesario «perder el estigma» de los diciembre, en los que se suelen recrudecer las protestas sociales, y advirtió que «si algún sector piensa que se beneficia generando caos o situaciones de violencia es algo condenable y que responde a un interés político partidario claro y no responde a querer solucionar una situación».
«Vamos a tener un diciembre tranquilo, los argentinos nos merecemos un diciembre tranquilo», puntualizó.
Stanley dijo también que no hay un bono adicional para los beneficiarios de planes sociales, más allá de los beneficios anunciados por el presidente Mauricio Macri en cuanto al refuerzo a programas alimentarios, los dos bonos para la Asignación Universal por Hijo (AUH) y la ampliación de los créditos del Anses.