La titular de la Oficina Anticorrupción (OA), Laura Alonso, viajó nuevamente a París para participar del Foro Global sobre Anticorrupción e Integridad de la OCDE, y firmó la adhesión de Argentina a la nueva «Recomendación de Integridad Pública,» por la que se acordó que los países que integran dicha organización realicen un estudio del sistema de integridad argentino.
Este estudio, según informaron desde la OA, se realizará en base a tres pilares: construir un sistema coherente e integral de integridad pública; cultiva ar una cultura de integridad pública y facilitar la rendición de cuentas efectivas y se llevará a cabo a lo largo de 36 meses.
«La OCDE realizará un estudio técnico del Sistema de Integridad Pública argentino y hará recomendaciones para su mejoramiento», sostuvo Alonso.
«El Secretario General Angel Gurría y el equipo de la OCDE se mostraron entusiasmados en apoyar a la Argentina con soluciones institucionales y mejorar prácticas. Hubo una predisposición excelente y un reconocimiento de avances que van en el buen sentido», remarcó Alonso desde París tras firmar la adhesión junto a Gurría.
Según informaron desde la OA, la OCDE prestará apoyo al país en la modernización de su sistema de integridad y en la aplicación de mecanismos de control, a la vez que realizará un examen de las políticas de integridad de la Argentina y un informe de progreso que evalúe la implementación de las recomendaciones que haya hecho.
En ese contexto, Argentina ya promulgó una nueva Ley de Acceso a la Información Pública; la reglamentación (tras 16 años) del Régimen de Obsequios y Viajes financiados por terceros a funcionarios públicos; la firma de dos Decretos de Integridad en Juicios contra el Estado y contrataciones públicas; la publicación en formato abierto de las declaraciones juradas de 45 mil funcionarios; y el envío al Congreso del proyecto de Ley de Responsabilidad Penal Empresaria que permite sancionar a las empresas y no solo a las personas que cometan delitos de corrupción.
Según detalló Alonso a Télam, gracias a estos avances el año pasado el ïndice de Percepción de la Corrupción (IPC) realizado por Transparencia Internacional mostró que Argentina escaló 12 posiciones entre los países con menor percepción de corrupción.
Así, «en 2015 Argentina ocupaba el puesto 107 y en 2016 se ubicó en el 95», detallaron desde la OA.
Sin embargo, Argentina continúa por debajo del promedio regional de corrupción, lo que es uno de los factores problemáticos para acceder a inversiones.
«El apoyo de la OCDE para la realización de este Estudio de Integridad apunta a fortalecer la institucionalidad y a promover la transparencia y la integridad pública como condiciones necesarias para generar puestos de trabajo y desarrollo económico», sostiene el comunicado oficial que emitió la Oficina Anticorrupción.