El oficialista interbloque Cambiemos de la Cámara de Diputados sumará una banca propia como consecuencia de la renuncia al cuerpo de Juan Casañas (Bloque Bicentenario), designado funcionario en el Ministerio de Agricultura, y su consecuente reemplazo por Sandra Manzone, de la Coalición Cívica.

Así, la bancada presidida por el radical Mario Negri pasará a tener 87 integrantes, sumando los 41 del PRO; los 36 radicales; los 6 de la Coalición Cívica; los 2 del Frente Cívico catamarqueño; la del Partido Demócrata Progresista y un macrista misionero.

De esta manera, el interbloque oficialista ampliará a 15 la diferencia de bancas con la segunda fuerza de la Cámara, el Frente para la Victoria-PJ, que reúne 72 diputados. Lejos de esos dos espacios, el Frente Renovador-UNA continúa como tercero en número de integrantes, con 38.

El tucumano Casañas, que asumirá como coordinador de ‘Cambio Rural’ del Ministerio de Agricultura, había ingresado por la lista del radicalismo tucumano, pero a principios del año pasado se alejo del interbloque Cambiemos por diferencias con las autoridades de ese espacio.

Allí conformó un nuevo bloque, llamado del Bicentenario, junto a otra radical tucumana, Teresita Villavicencio, que lo acompaño en el portazo al interbloque Cambiemos.

Sin embargo, durante todo 2016, ambos diputados acompañaron la mayoría de las políticas del Poder Ejecutivo nacional.
Con el ingreso de Manzone, en tanto, la Coalición Cívica gana otra banca y llega a los 6 integrantes, un 50 por ciento más que los que poseía en noviembre pasado, cuando sólo contaba con 4.

Es que en diciembre, al fallecer el diputado radical por Catamarca Amado Quintar, fue reemplazado por la «lilita» Orieta Cecilia Vera González.

Sumar un diputado propio para llegar a 87 bancas no es un dato menor para el oficialismo, ya que el límite de un tercio del cuerpo, clave para contrarrestar mayorías de dos tercios, es de 86 bancas.

Así, si el oficialismo está abroquelado, la oposición nunca podría reunir los 172 votos necesarios para las votaciones que requieren dos tercios del cuerpo, teniendo en cuenta que el total de diputados de la Cámara son 257 y que el oficialismo cuenta con 87.

La partida de Casañas significa, además, la despedida del último diputado nacional que ingresó en 2009 en el marco de la ofensiva que permitió que accedan a sus bancas los denominados «agrodiputados», consecuencia de la feroz disputa de una año antes entre el sector agropecuario y el gobierno kirchnerista.

Los agrodiputados que llegaron al Congreso luego de las elecciones del 28 de julio de 2009 fueron Jorge Chemes; Lucio Aspiazu, Atilio Benedetti, Hirma Re, Ulises Forte; Pablo Orsolini (FAA); Ricardo Buryaile y Casañas, vinculado con la Federacíon Agraria Argentina (FAA).

Los seis primeros terminaron sus mandatos en 2013 sin mayores logros para el sector, y convivieron en la Cámara dos años con el radical y ex vicepresidente de la FAA, Omar Barchetta, que dejó su banca en diciembre de 2015.

Buryaile y Casañas fueron quienes mayor proyección tuvieron, ya que ocuparon en forma alternada la presidencia de la comisión de Agricultura de la Cámara y lograron renovar sus bancas en diciembre de 2013.

Dos años después, el formoseño renunció a la Cámara para asumir como ministro de Agricultura; y hoy formalizó la integración de Casañas a su equipo, cerrando así las presencias de los «agrodiputados» en Diputados.