El ex presidente Eduardo Duhalde afirmó que «en Argentina la gente está enojada, descreída de los políticos y de la política» y dijo que mientras ejerció la presidencia de la Nación nunca le hicieron un paro «porque estaban los trabajadores y los empresarios en el Diálogo Argentino», el espacio que generó como punto de encuentro y búsqueda de consensos.

Duhalde reafirmó, además, su firme convicción de «conducir al Justicialismo» en la nueva etapa que se avecina y dijo que se propone alcanzar ese objetivo «ganando la elección interna» contra cualquier oponente que quiera presentarse, en el marco de una entrevista con Télam Radio.

“En Argentina, si nos seguimos peleando no hay solución; peleando no vamos a ningún lado, los países que han salido de crisis como la que vivimos, han salido juntándose”, enfatizó.

El ex gobernador bonaerense subrayó que “cuando uno gobierna con todos, todos están compenetrados con lo que hay que hacer” y mencionó que cuando gobernó el país, en diferentes ocasiones encaró reuniones en Diálogo Argentino «con una idea y salía mejorada de ese ámbito».

“Ninguno de los partidos históricos está interpretando a las nuevas generaciones, que son las que van a gobernar dentro de diez años. Hay que sentarse, sino seguiremos a los tumbos», apuntó.

El ex mandatario aseguró que «cuando Naciones Unidas hace encuestas en Sudamérica, da que a más de la mitad de la gente no le interesa la democracia, sino que quieren que le resuelvan los problemas, y eso es peligroso”.
Duhalde se refirió también al peronismo y  señaló que «no tiene conducción».

«Muchos de los que están en el partido lo pueden vaciar” advirtió y lo comparó con  «un hormiguero pateado».

“Hay una necesidad de conducción en el justicialismo, una cosa es ser presidente (diputado José Luis Gioja) porque lo eligieron entre gallos y medianoche, unos congresales que ni siquiera eran congresales. Las últimas elecciones importantes que tuvo el justicialismo fueron las de (Antonio) Cafiero y (Carlos) Menem”, expresó.

Duhalde afirmó luego que «ni en broma sería presidente de la Nación» nuevamente y opinó que serán «importantes», en especial para el gobierno, las elecciones legislativas de octubre próximo.