A lo largo del último año, el municipio desarrolló más de 80 operativos en avenida 7 de 44 a 55, los centros comerciales de calle 8 y 12, la avenida 13 de 44 a 60, el Paseo del Bosque, avenida 72, diagonal 80 y Plaza San Martín.
Según se explicó desde el municipio, el problema más recurrente que se genera durante las tareas de control es la reincidencia de los actores implicados que, siendo retirados sus puestos y decomisada su mercadería, vuelven a instalarse al día siguiente.
En este marco, entre los 550 puestos desalojados a lo largo del año, se retiraron comercios ambulantes ilegales relacionados a la comercialización de remeras y marketing en los distintos recitales que hubo en la ciudad, a puestos de venta de CD’s y DVD’s, como así también de ventas de frutas y verduras, bijouterie y pirotecnia ilegal. Asimismo, se removieron más de 30 parrillas ambulantes decomisadas por permanecer en la vía pública.
Según el parte de mercadería incautada, se logró el decomiso de 100 kilos de pirotecnia; 2 toneladas de frutas y verduras; y 5 bultos de objetos, accesorios y bijouterie en cada operativo desarrollado en el microcentro.
La venta ambulante vulnera la ley 11.723, (de Propiedad Intelectual); la 22.362, de Patentes y Marcas; la 22.415, de Contrabando y la 24.769 (Régimen Penal Tributario), dictadas por el Congreso.
Durante los controles, los inspectores exigen el cumplimiento de los artículos 129, 132 y 133 de la Ordenanza Municipal Nº 6147/85, vinculados a la obstrucción y comercialización en la vía pública, y toman como medida cautelar el “decomiso”, establecido en los artículos 21 y 373 de la misma norma.