El pasivo bonaerense creció 10 mil millones por año durante el sciolismo. Para el massismo se trata de 13 mil millones de dólares y casi sin obra pública. Los sciolistas aclaran que en relación al PBI y la recaudación la deuda bajó y es menor a la de municipios del Frente Renovador.

El sciolismo y el massismo se cruzaron en un duro debate por el nivel de endeudamiento de la provincia de Buenos Aires, en plena disputa por el tratamiento del presupuesto provincial, trabado en la Legislatura.

Según un informe de la Asociación Argentina de Presupuesto, publicado hoy por Clarín, en seis años del gobierno de Scioli la deuda provincial creció a 80 mil millones de pesos, a una proporción de casi 10 mil al año.

“El presupuesto de la Provincia de Buenos Aires merece una atención especial, tanto por su impacto en la población bonaerense como por su magnitud y participación en el presupuesto del sector público consolidado de Argentina. La provincia de Buenos Aires concentra no sólo el 38,9% de la población del país, sino también el 35,3% del PBI”, destacó el informe.

Jorge Sarghini, ex ministro de Economía provincial y senador provincial electo por el Frente Renovador, aseguró que el pasivo bonaerense creció 13 mil millones de dólares, pero que aun así la inversión pública decreció como nunca.

“En inversión pública, se asigna sólo el 3% del total del gasto, el porcentaje más bajo presupuestado en la historia de la Provincia. Con el agravante que si se repite el comportamiento de los últimos cuatro años, en los que sólo se ejecutó la mitad de lo previsto, la inversión real no superaría el 1,5% del total”, planteó el senador.

O sea, aunque la provincia no se endeude para pagar gastos corrientes, estos pasaron a representar la mayoría del gasto público.

Respuesta sciolista

En la provincia respondieron con un argumento puntual: en porcentaje con PBI, la deuda bonaerense decayó.

“En 2007 eran necesarios 13 meses de recaudación para saldar el stock de deuda, mientras que para el cierre de este año se necesitará el equivalente a 7,5 meses”, señaló la ministra de Economía, Silvina Batakis.

“Si hoy la Provincia tuviera el porcentaje de deuda del año 2007 respecto a los ingresos, tendríamos que pedirle a la legislatura una autorización de endeudamiento de 132 mil millones, sin embargo, estamos solicitando 12,5 mil millones para poder seguir realizando inversiones en el territorio bonaerenses”.

“La Provincia no le pide a la legislatura endeudarse para pagar gastos corrientes, ya que estos se financian con recursos propios. Lo que solicitamos es la aprobación de este proyecto para que el gobierno provincial pueda seguir financiando el desarrollo para mejorar la competitividad y la productividad de distintos sectores, y para pagar la deuda que se tuvo que contraer con Nación para poder rescatar los Patacones”, concluyó Batakis.

La alusión no fue casual: fue Sarghini, como ministro de Economía de Carlos Ruckauf, quien diseñó la impresión de patacones a fines de 2011, que abrió la puerta a cuasi monedas en el resto de las provincias.

Para el diputado Ivan Budassi, uno de los arquitectos del presupuesto provincial, “comparar números en el aire sin relacionarlo con ninguna pauta no sirve para nada, porque no se sabe de qué se está hablando”.

“El valor relativo de la deuda bajó. No es algo arbitrario La capacidad de pago se mide por recaudación y PBI. ES una medida mundial. Nosotros estamos pidiendo una deuda del 8% del presupuesto cuando los municipios massistas tienen pedido endeudamientos superiores al 25%”, completó.

«La recaudación crece por la inflación»

El diputado Juan Carlos Juárez, del FAP, secretario de la Comisión de Presupuesto, coincide con Sarghini.

“Es absurdo una comparación lineal con el PBI, porque la mayoría de la recaudación que creció lo hizo por ingresos brutos, que es producto de la inflación”.

“La realidad es que vamos a tener una deuda consolidada de casi 80 mil millones de pesos que representa el gasto corriente. Porque no hay obra pública que deje Scioli para justificar ese pasivo”.